miércoles, 22 de agosto de 2012

Tchaikovski: Concierto para piano N° 1



De 1874 data la primera versión del Concierto N° 1 para piano y orquesta de Piotr Ilich Tchaikovski. A esa altura de su vida, 34 años, y pese a sus crisis nerviosas, Piotr ya se había consolidado definitivamente como compositor. De modo que no le hicieron ninguna gracia los comentarios que recibió del virtuoso del teclado Nikolai Rubinstein cuando tocó ante él su primer concierto para piano. Nikolai era su amigo, era quien había acompañado al provinciano Piotr Ilich en sus primeros años en Moscú, mostrándole la ciudad y abriendo para él, posteriormente, muchas puertas difíciles de franquear.

Era navidad de 1874, y Piotr y Nikolai habían sido invitados a esperar al Papá Noel ruso en casa de un amigo común. Pero Nikolai había sugerido a Piotr que llevara su nueva partitura para que, camino a casa del amigo, pasaran al Conservatorio a examinar el concierto que acababa de terminar. Piotr accedió encantado pues deseaba escuchar la opinión de un virtuoso, conocer su parecer técnico sobre algunos pasajes muy arduos de la ejecución, que en ese momento los tenía y sigue teniendo.

Cuando terminó de tocar el movimiento inicial, Nikolai permaneció mudo, sin decir una palabra. Piotr no se amilanó y continuó con el resto.
–¿Y bien? –preguntó al final del concierto completo.
Nikolai no escatimó irreverencias. Dijo que el concierto no valía nada, que era inejecutable, que los temas eran poco felices, en suma, trató a Piotr como un principiante inexperto e incapaz. Así, al menos, lo entendió Piotr Ilich. Luego lo contaría en su diario en los siguientes términos:
"Yo no sólo estaba estupefacto, sino afligido por toda esa escena. Ya no soy un muchacho necio, que comienza a hacer sus primeras tentativas de composición; no tengo necesidad de enseñanzas de nadie, sobre todo si se me dan en ese tono áspero y hostil..."
Pero a Nikolai tampoco le salió barato. Piotr tenía pensado dedicarle el concierto a este virtuoso de su tiempo pero, habiéndose enfriado las relaciones a raíz del rudo incidente, finalmente lo dedicó al pianista y director Hans von Büllow, gran admirador del compositor ruso, quien lo estrenó con él como solista en Boston, EEUU, en 1875, y lo dirigió luego por todas partes con gran éxito. Sin embargo, las sugerencias de Nikolai no cayeron en saco roto pues Tchaikovski, quince años después, reelaboró por completo la parte pianística, convirtiendo al concierto, desde entonces, en pieza predilecta de los virtuosos del piano, Nikolai Rubinstein incluido.


Movimientos:

I. Allegro non troppo e molto maestoso - Allegro con spirito
El movimiento, inusualmente largo (20 min), lo abre toda la orquesta, luego entra el tema principal llevado por las cuerdas acompañadas por los magníficos acordes del piano que han hecho célebre al concierto completo. El movimiento, una especie de duelo entre el piano y la orquesta, presenta considerables dificultades al solista.
II. Andantino semplice - Prestissimo (20:45)
Se inicia con un tema de gran delizadeza que expone primero la flauta siendo recogido luego por el piano. Una parte central –prestissimo– sirve de contraste por su liviandad y su ritmo de tres cuartos.
III. Allegro con fuoco (27:19)
Está construido sobre temas basados en danzas o ritmos populares rusos. El primer tema, rítmicamente, muestra un marcado carácter ruso. En la coda final vuelve a escucharse el primer tema, para conducir a un final fragoroso y de enorme vigor, algo efectista talvez, que exige del pianista la realización del célebre "pasaje de octavas" que solo algunos virtuosos logran abordar con éxito. Anna Fedorova lo hace, acompañada de la Nordwestdeutsche Philharmonie conducida por Yves Abel.

12 comentarios :

  1. Respuestas
    1. O KE Y. Gracias por dejar esa palabra aquí. Saludos.

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  2. Hola, Gerardo: Gracias por tus palabras. Saludos.

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  3. no me canso de escuchar el concierto tocado por Martha, me refresca el espiritu

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  4. Es que Martha está muy joven. Gracias, Rafael, por dejar tu comentario aquí.

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  5. Sin duda alguna, Es mi versión favorita...

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  6. Hola, Anónimo: Gracias por dejar aquí tu comentario.

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  7. Vaya, han pasado 4 años desde el último comentario. Totalmente de acuerdo con la descripción en el blog.

    Saludos

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    1. Hola, Unknown: Se puso flojo el auditorio. Muchas gracias por tu comentario, entonces. Volviste el artículo a la vida. Un saludo.

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  8. gracias por la info en el blog, me sirvió para entender las dificultades que presenta la obra y confirmar lo que intuía sobre las danzas rusas. Acabo de escucharla con la genial Martha dirigida por el maestro Barenboim en el CCK de Buenos Aires. Es una pieza increíblemente maravillosa.

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    1. Hola, Grace: Qué suerte la tuya. Creo que la Marthita no ha visitado nunca este pobre paisito, Chile. (Aunque puede que haya venido cuando yo vivía afuera y no me enteré).
      Qué bueno que la info del blog te haya sido de ayuda. Saludos, y muchas gracias por el comentario..

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